Sin mucho más que decir que las turbinas se han parado. El tiempo ha reposado. Animos caídos que pedían un respiro parece que ahora aletean levantando pies del suelo. Husmeo por espacios indeterminados, quemados, nuevos, dulces, salados. Sombras blancas y puras de los recuerdos de otros días más risueños me acompañan, sabores pasados y henchidos, recuerdos que son como amantes destelleando, a veces parecen estar enlatados en conserva de aceite vegetal, para el después.
Días que amanecen echando demenos, no soy capaza, capaz de echar de más, porque reservo especias. Mienteme despacio que voy sin prisa.
Días que amanecen echando demenos, no soy capaza, capaz de echar de más, porque reservo especias. Mienteme despacio que voy sin prisa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario