Es evidente que al dar el primer paso, poniendo el pie en la calle, no podemos disimular la cara con la que nos hemos levantado. A veces por mucho que queramos disimular un estado de animo triste, cansancio, somnolencia etc, siempre tendremos una acción física y biológica que nos delata, como las ojeras, ojos cansados, brillo en la mirada tenue, sonrisa vaga... ( y las que no se me ocurren)
Hoy día, ver algo así es aun mas triste, Por causas desconocidas ver a una persona deprimida por la calle, la cual lleva miles de problemas a la espalda, da mala espina... y no es culpa suya, que ya tiene bastante.Pero por motivos varios, siempre alguien con ganas de reir, de ojos vivos hará que te sientas mejor..Será que todos llevamos una mochila de piedras, pero ver que a unos le pesa mas que a otros la misma piedra, te contagia un estado anímico bajo.
Observando hace unos días, me di cuanta.Y es que nunca nadie ajeno a ti esta dispuesto a ayudarte.
Si estas en una parada de autobús, con una cara muy larga, la persona que venga va a ser mas reacia a preguntarte si hace mucho que pasó el autobús y que hora es...Y es que el ser humano huye de lo chungo* como los malos recuerdos que al final se olvidan; Pues algo parecido.
Probablemente la gente más cercana será siempre quien más se preocupa por ti, están aquellas personas que sólo enlucen el problema con un poco de escayola, y están de entre esas pocas, una o dos que pierden una mañana o una tarde o el dia completo, o lo que necesiten, para ponerse el mono azul, para empezar a picar y sanear bien los problemas que llevamos en nuestra cara, y una vez hecho eso cuando todo esta bien saneado y fortalecido el cimiento principal ( los ojos), entonces darán esa capa de escayola blanca y purificante, que hará que todo sea una mochila vacía.
Porque una cara alegre, sonriente, por la calle, siempre aliviara los problemas de alguien que la mire...y no cuesta nada. Es gratis.
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